jueves, 2 de octubre de 2008

CRECE PROTESTA CONTRA COCON


BLOQUEAN OTRA CALLE Y CONVOCAN A CIERRE MASIVO

DZITBALCHE, Calkiní.— Crece la inconformidad por el mal estado de las calles en Dzitbalché, ahora a la protesta de los vecinos en Santa Rosalía se sumaron los del barrio Alameda que con piedras y ramas cerraron la calle 22 de su sector.

Decenas de habitantes recriminan la ineficacia del alcalde Jorge Cocon Collí y convocan a más lugareños al cierre masivo de arterias en la población.

La postura es determinante, las calles permanecerán cerradas hasta que el alcalde Jorge Cocon Collí y el presidente de la Junta Municipal, Roberto Uicab Ku, pavimenten las arterias, señalaron los inconformes.

Mientras en Santa Rosalía decenas de vecinos encabezados por Elsa María Chan Simá, mantienen el bloqueo de su calle con un cerro de escombros, la mañana de ayer también fue cerrada la calle 22 en el barrio Alameda.

Gertrudis Can Chan, Benita Kantún Chi, Adolfo Chi Kantún, Juana López Velázquez, Elvira Chi Tun, Ana María Can Chan, María Concepción Caamal Chuc y Paulina Chan Chan, se encuentran entre los manifestantes.

Las causas son las mismas, pavimentación de las arterias que durante varios años han permanecido en el abandono a pesar de las constantes demandas ciudadanas.

Los habitantes exigen a las autoridades solucionar la problemática de calles destruidas, situación que se repite en las distintas comunidades del Municipio.

En el caso de Dzitbalché, el presidente de la junta Roberto Uicab Ku, ha prometido intervenir pero esto significa que sólo enviará sascab para rellenar las calles, dijeron.

Esta medida —manifestaron— no sirve de nada porque la lluvia deslava el sascab y convierte la calle en un fangal que permanece durante semanas.

En el barrio Alameda, Gertrudis Can Chan, reconoció que se solidarizaron con los vecinos de Santa Rosalía porque comparten el mismo problema y siguieron su ejemplo. Ahora —dijo— convocamos a los vecinos de otras demarcaciones a sumarse a las protestas y continuar el cierre de más arterias, “al fin que lo que sobran son calles miserables”, señaló.

Al igual que en el barrio de Santa Rosalía, los vecinos de la Alameda estamos dispuestos a llegar hasta la últimas consecuencias y no se reabrirán las calles hasta que sean pavimentadas, advirtió Can Chan. Cocon Collí tiene que hacer frente a su responsabilidad con la ciudadanía no sólo en la cabecera sino en todo el Municipio, porque no queremos que nos deje Calkiní hecho pedazos, sentenció la mujer.
Tampoco tememos enfrentarnos a la fuerza pública si es necesario —afirmó Can Chan— la situación en que vivimos es tan deplorable que no nos asustamos fácilmente, insistió la manifestante.