¿DE COMUNICADOR A SECRETARIO?

TENABO.- El comodín de la comuna tenabeña Israel Armando Koyoc, actual director de comunicación social, tiene la habilidad de convencer, persuadir y lograr que el alcalde Manuel Jesús Colli Ku lo premie con los cargos mejor pagados y siempre ha buscado la forma para que tenga personal a su cargo que le saque la chamba.
Como es sabido en el inicio de la administración panista, dio tumbos y tropiezos en el primer cargo que ocupó la de oficial mayor, ya que se hacia bolas con las facturas que los proveedores y acreedores le hacían llegar, por lo que fue transferido a la dirección de comunicación social, pero a un año de estar al frente, no aprendió ni a redactar un boletín ni a tomar una foto.
Actualmente siente pasos en la azotea y por ello ya tiene en la mira otro puesto, pero ahora aspira a ser el secretario de la comuna y con ello desplazar a Arsenio Ku Pech, quien ha sabido llevar con destreza y habilidad los asuntos de la comuna, pero la labor difamatoria de “el tata” (Israel Koyoc) esta logrando que el alcalde desconfiara del actual secretario.
Israel Armando Koyoc ha abandonado su labor como director de comunicación social, y en el transcurso de esta semana se supo que le cortaron el servicio de Internet y los empleados de esta dirección no han podido sacar el trabajo que les corresponde.

COMISARIO VENDE DESPENSAS

Los habitantes de la comunidad de Chunkanan del municipio de Hecelchakan acusaron al comisario municipal Juan Moo, de no atender sus obligaciones como tal y solo se ha dedicado a buscar culpables de su ineficacia, acusando al edil Modesto Pech Uitz de darle a tiempo y forma los recursos que le corresponde.
Por lo que cada quince días vende las despensas a 40 pesos, y el recurso que se recauda lo divide entre su comité para dedicarse a adorar al dios Baco.
Para celebrar el día de reyes les cobro a 20 pesos a las madres de familia, supuestamente para adquirir combustible para las gestiones en Campeche para la obtención de juguetes, y con estos recursos se dedico a emborrachar a sus amigos e incondicionales, pero lo peor es que se siente intocable y con la impunidad que le proporciona la amistad del alcalde Modesto Pech Uitz.

Y LA LIBERTAD DE EXPRESION

Nos llego a nuestro correo fernando_caamal1@hotmail.com que el reportero de policía, Jorge Villanueva Peña, denunció ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Campeche (CDHEC) al nuevo director del penal de Ciudad del Carmen, Cristian Israel Alcocer Jiménez, porque fue obligado a entregar sus equipos de trabajo y a quitarse la ropa, antes de ingresar al reclusorio.
Según el documento, Alcocer Jiménez dio la orden a los vigilantes del Centro de Readaptación Social y a los agentes de la Policía Estatal Preventiva (PEP) de maltratar al comunicador, además de negarle la entrevista y retenerlo por más de media hora contra su voluntad.

La pregunta seria ¿si a un reportero lo tratan de esta manera tan vil, que trato recibirán las humildes personas que, muchas veces tienen a sus familiares en el CERESO por haber robado un pavo o una gallina, para llevar el alimento a sus hijos?

DIRECTOR DE CERESO DEL CARMEN NO RESPETA LA LIBERTAD DE EXPRESION

CIUDAD DEL CARMEN.- El reportero de policía, Jorge Villanueva Peña, denunció ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Campeche (CDHEC) al nuevo director del penal de Ciudad del Carmen, Cristian Israel Alcocer Jiménez, porque fue obligado a entregar sus equipos de trabajo y a quitarse la ropa, antes de ingresar al reclusorio.
Alcocer Jiménez dio la orden a los vigilantes del Centro de Readaptación Social y a los agentes de la Policía Estatal Preventiva (PEP) de maltratar al comunicador, además de negarle la entrevista y retenerlo por más de media hora contra su voluntad.
Los hechos se registraron la mañana de este viernes, y luego, Villanueva Peña acudió ante la visitaduría regional de la CDHEC, por abuso de autoridad y privación ilegal de la libertad, y la queja fue recibida por Darwin Humberto Fuentes Badillo.
Según el representante de un medio de comunicación local, cerca de las 10:30 horas se presentó al Centro de Readaptación Social, con la finalidad de entrevistar al nuevo director del penal, para conocer su plan de trabajo y los cambios que seguirían.
Luego de acreditarse, los elementos de la PEP tomaron la credencial e ingresaron para solicitar instrucciones y al regresar, indicaron que el reportero sería recibido.
Posteriormente, procedieron a revisarle sus pertenencias, entre ellas su cámara fotográfica, su grabadora de audio, pilas, memorias USB, libretas y plumas, entre otras cosas, y le dijeron que todo estaba en orden y que podía guardar sus cosas.
Tras la revisión, un agente de la corporación le indicó que ingresara a un cuarto con dos puertas, donde sin informarle de qué se trataba, pero ya en el interior, le indicaron que se despojara de la camisa, situación a la accedió y luego le indicaron que se bajara los pantalones, lo que lo incomodó, ya que argumentó que solo buscaba una entrevista con el director del penal y no una “visita conyugal” o algo por el estilo, pero lamentablemente ya se encontraba dentro de las instalaciones y fue vil y cobardemente injuriado y obligado a desnudarse.
Los policías mencionaron que “era parte del proceso de revisión” y que obedecían una instrucción del mismo Alcocer Jiménez.
Posteriormente, con su ropa en las manos, lo enviaron a otro escritorio, donde lo esperaba otro agente de la Policía Estatal Preventiva, quien le dijo en tono de burla que “lo sentía, pero que el director había indicado que siempre no lo recibiría”.
En ese momento, salió de una oficina el elemento de la PEP y quien hasta hace unos días era el encargado de la seguridad del penal, Raymundo Román Cano Lozano, quien le entregó sus credenciales, indicando “que lo retachen, siempre no lo van a recibir”.
El reportero solicitó que le indicaran la salida y al intentar salir, se dio cuenta que su mochila, con su cámara y su equipo de trabajo, no estaba, por lo que les indicó a los agentes que se la entregaran y estos manifestaron que no podían, porque la estaban revisando.
El afectado manifestó su inconformidad y demandó que le abrieran la puerta, porque iría a presentar una denuncia ante el Ministerio Público, por el delito de robo de su equipo y los agentes mantuvieron cerrada la puerta por espacio de 40 minutos, hasta que le entregaron su equipo con las fotos de la cámara borradas.